El 31 de agosto de cada año se celebra el Día Internacional de la Solidaridad, en honor al movimiento social polaco Solidaridad, que en 1980 fue uno de los principales responsables de la caída del muro de Berlín. Uno de sus dirigentes, Lech Walesa, ganó el Nobel de la Paz gracias a que divulgó los ideales de la solidaridad por todo el mundo.

La solidaridad se basa en un principio básico de ayuda mutua y en el apoyo a una causa o al interés de otro, sobre todo en situaciones difíciles. Todos podemos ser solidarios de diferentes formas. Pero en la entrada de hoy, os contamos las historias de algunos ganadores de la lotería, que decidieron ayudar a otros.

La solidaridad de algunos afortunados que ganaron la lotería.

Margaret Loughrey ganó 40 millones en Euromillones. Ella decidió compartir la mitad de su premio con personas sin empleo que necesitaran ayuda y además usó parte del premio para crear puestos de trabajo. Y es que, actualmente un puesto de trabajo puede tener tanto valor como un premio de lotería.

Deana Sampson perdió a su hermano, que sufría epilepsia, dos años antes de ganar seis millones de euros. Después de cobrar el premio, contactó con una ONG que se dedica a preparar perros de asistencia para ayudar a personas que lo necesitan, para donar parte de su premio. Desde entonces colabora periódicamente con esta asociación.

Día Internacional de la Solidaridad

Tom Cook y Joe Feeney son dos amigos de Wisconsin que de jóvenes acordaron que si les tocaba la lotería, los dos compartirían el premio. Hace unos años Tom ganó 22 millones de dólares en la lotería y, tal como pactó con su amigo con un fuerte apretón de manos, repartió con él la mitad del premio.

En 2006 Derek Mabossou y sus compañeros de trabajo ganaron 365 millones de la Powerball de EEUU. Desde entonces, Derek ha realizado donaciones periódicas a un centro social donde viven personas sin recursos económicos. En Navidad de 2016, repartió un total de 25.000 dólares entre 550 personas.

Colin y Chris Weir ganaron el bote de 190 millones de Euromillones en 2011. Al tiempo conocieron a Kieran Maxwell, un chico de 13 años que perdió la pierna por el cáncer. Así que la pareja decidió pagarle una prótesis. Gracias a la solidaridad de esta pareja, Kieran fue uno de los portadores de la antorcha olímpica en los JJOO de Londres 2012.

Ellos son solo unos pocos de las miles de personas que después de ganar la lotería deciden donar una parte, colaborar con alguna asociación, ayudar a otros…

Si tú ganaras un gran premio de lotería, ¿colaborarías con alguna causa solidaria? ¡Cuéntanoslo en comentarios!