Lorna Hewitt es una mujer residente en Sisters, una pequeña localidad del estado de Oregón, en el norte de Estados Unidos, que gracias a las mascarillas que vende ganó la lotería hace unas semanas.

Antes de la crisis sanitaria y económica por la que todo el mundo se está viendo afectado, Lorna era camarera en un restaurante de su localidad. Por culpa del Covid-19 y el restaurante tuvo que cerrar y Lorna, se quedó sin empleo. Por suerte, poco después consiguió un trabajo en una tienda de alimentación.

Al igual que en España, al principio las existencias de mascarillas eran mínimas, y ella y sus compañeros no disponían de mascarillas higiénicas porque en la mayoría de farmacias estaban agotadas. Esto animó a Lorna a coser algunas mascarillas en su casa para sus compañeros de trabajo y su jefe, quien vio una posible fuente de ingresos.

Ante la escasez de mascarillas decidió poner a la venta las que ella cosía. Le propuso a Lorna seguir haciendo más mascarillas para comenzar a venderlas, y así lo hicieron.

Con parte del dinero de las mascarillas decidió comprar un boleto.

En un día en el que sentía con suerte, decidió comprar un boleto de la lotería Keno, un tipo de juego muy popular en varios estados de Estados Unidos. Lo que seguramente no imaginaba es que ese boleto la haría ganar 127.000 dólares en el acto.

Ahora, gracias a este empujón económico, ha decidido seguir con su pequeño negocio. La afortunada ganadora ha destinado una pequeña parte del premio a comprar suministros para poder seguir fabricando este nuevo accesorio tan necesario para todos.

Ahora Lorna puede afrontar esta crisis de una manera muy diferente al comienzo de la crisis, cuando se quedó sin empleo. Pero asgeura que no olvidará todo por lo que ha tenido que pasar y espera poder seguir ayudando a su comunidad.

A veces las buenas acciones parecen ser recompensadas en los momentos que menos espera uno…