Voltaire fue una de las principales figuras de la Ilustración Francesa. Lo que no todo el mundo sabe es que en los años veinte del siglo XVIII llevó a cabo un método para hacerse rico jugando a la Lotería. ¡Y le funcionó!

Procedía de una familia adinerada y pudo estudiar en la universidad pero sus ideas contrarias al Gobierno le llevaron a prisión en dos ocasiones e incluso al exilio a Gran Bretaña. Cuando regresó a Francia, su situación económica no era buena pero allí le estaba esperando la solución. En una cena con amigos conoció al matemático Charles Marie de la Condamine, que vio una oportunidad para hacerse de oro en la crisis económica que sufría el país.

Un plan casi perfecto

El Ministro de Finanzas del momento pensó que para elevar el valor de los bonos del Estado y recuperar la confianza internacional en la economía francesa, ofrecería un billete de lotería a sus propietarios. Si resultaba premiado, este ganaba el valor original del bono además de un premio de 500.000 libras francesas. En aquel momento esto era suficiente como para que una persona no tuviese que volver a preocuparse por el dinero.

El matemático se dio cuenta del error del Ministro de Finanzas. Todo propietario de un bono podía comprar un boleto de lotería independientemente del valor del bono. Así que decidieron comprar bonos baratos para aumentar las posibilidades de ganar el premio. La única laguna del plan era que para hacerse con los boletos de lotería había que acudir a un notario y en París no había tantos. Si alguno descubría su idea, saltaría la alarma. Afortunadamente Voltaire llegó a un acuerdo con uno y pudieron salvar este contratiempo.

Estatua Voltaire

El día 8 de cada mes, cuando se efectuaba el sorteo, alguno de los billetes que habían comprado resultaba premiado. De esta manera, el dinero empezó a entrar en la asociación haciendo ricos a todos sus miembros y, si no hubiera sido porque Voltaire se dedicó a firmar los boletos, nadie habría descubierto la trama.

Cuando las autoridades se dieron cuenta, el ministro de Finanzas demandó a Voltaire y a sus compañeros, quienes ganaron el juicio. Tras ello, el Ministro fue destituido y se clausuró la lotería; aunque para entonces los miembros de la sociedad ya se habían hecho ricos y pudieron dedicarse a lo que deseaban.

Si alguna vez ideáis vuestro propio método, no cometáis el mismo error que Voltaire e intentad que no os pillen.

¡Mucha suerte!